martes, 17 de noviembre de 2015

Necesitas ponerte a dieta de contenidos

shutterstock_170072075Como muchos de los que nos dedicamos al mundo online, llevo tiempo dándole vueltas a la mejor manera de leer sólo los contenidos que realmente me aporten valor.

Empecé esta reflexión en 2010 hablando sobre la figura del content curator (definida un año antes por Rohit Bhargava). Lo traté de definir de la forma más sencilla posible.

Definición de content curator

“Un especialista cuyos conocimientos y experiencia aportan valor al filtrado previo a la distribución del contenido que distribuye.”

Pienso que esta figura y el valor que aportan siguen siendo de total actualidad. De hecho en estos años hemos visto como especialistas de todas las áreas se han hecho un hueco en las redes sociales.

En 2011 me planteé la optimización del tiempo en social media mediante una infografía, hasta que en 2012 llegué a definir un proceso de curación de contenidos.

Proceso de curación de contenidos

El proceso de curacion de contenidos - tristanelosegui.com

El proceso de curación de contenidos

En este proceso he estado suscrito a decenas de blogs y finalmente he llegado a una lista más o menos estable. En 2014 hice una selección de los mejores blogs de marketing online, analítica web, social media y estrategia digital, que combinaba mi lista personal con los 16 mejores blogs, con las aportaciones de los lectores de este blog.

¿Pero sabéis lo que ocurre? Qué sigo casi igual que como empecé. Si, el proceso de curación de contenidos (fuentes de información, filtrado, lectura y difusión) está cada vez más optimizado, pero sigo teniendo el mismo tipo de problemas.

Problemas para asimilar todos los contenidos disponibles

Getting information off the internet Mitchell Kapor

1. Volumen excesivo de contenidos

Por mucho que filtres, selecciones a los mejores especialistas, uses herramientas,… y consigas llegar a unas fuentes con una mayor calidad de contenidos, seguirás encontrando contenido en exceso.

2. Dificultad para identificar las fuentes de contenido de calidad

Aunque hayas encontrado las fuentes que te ofrecen el contenido de mayor calidad, no todo lo que escriban va a ser bueno.

Ocurre con varias publicaciones de alta calidad. Publican mucho y no todo te resulta interesante. ¿Qué puedes hacer? ¿te das de baja?

3. Falta de tiempo para leer

Y todo esto nos lleva al problema original. No tenemos tiempo para leerlo todo. Nos dedicamos a escanear las redes sociales, a escanear nuestros lectores de RSS, newsletters,.

Y de vez en cuando encontramos algo que puede ser interesante. Normalmente hacemos un segundo escaneo y en función de lo que nos parezca o lo guardamos para leer, lo compartimos o si tenemos tiempo en ese momento lo leemos.

Y esto nos lleva al cuarto problema y más importante:

4. Poca o nula aportación de valor

Es decir, empleamos mucho tiempo en el filtrado de información, poco en la lectura y algo más en la difusión. Cuando deberíamos centrarnos en leer y aprender.

Empleamos más tiempo en filtrar y difundir contenido (sin importar demasiado si el contenido no es del todo bueno, pero lo compartimos para seguir creciendo en redes sociales), y menos a leer y aprender (que era el objetivo original).

Entonces ¿qué hacemos? Le veo difícil solución, pero aquí va mi receta.

Si quieres aprovechar el tiempo necesitas ponerte a ‘dieta informativa’

¿Qué significa ponerse a ‘dieta informativa’? ¿cuáles son los ingredientes de la receta?

1. Selección restrictiva de fuentes de contenido

Lo primero es decidir cuáles son las fuentes de contenido que vas a utilizar. En mi caso:

  • Redes sociales: una lista en Twitter con las personas que considero que son referencia en los temas que me interesan.
  • Blogs: selección de los blogs que realmente aportan valor.Este es uno de los mayores problemas. Para que un blog entre en mi lector de feeds tiene que cumplir dos normas: que publique contenido que me interese y que el número de publicaciones diarias no sea excesiva (que me de tiempo a leerlas todos los días).Para los casos en los que tengo que eliminar una de esas fuentes que te da pena borrar, recomiendo buscar la opción de suscribirte a su newsletter (preferiblemente a ‘lo más interesante’, no a una que tenga demasiada frecuencia de envío).Y si no tiene newsletter renuncio a esa fuente.

2. Uso de herramientas de filtrado y difusión de contenido

  • Lo más destacado: herramientas como Content Gems o Twurly te ayudarán a resumir lo más importante de lo que se dice en Twitter.
    Pregunta: ¿conocéis alguna herramienta que te resuma lo más destacado de una lista de Twitter?
  • Archivo y lectura de post: cuando un post te parece interesante, pero no tienes tiempo para leerlo en ese momento puedes enviarlo a este tipo de herramientas para leerlo más tarde con calma.
    Cuidado con este tipo de herramientas, porque podemos caer en la tentación de enviar cualquier post que pueda parecer interesante y terminar acumulando demasiados (y generando el problema inicial de exceso de contenido).Por eso recomiendo, al menos, una lectura en diagonal antes de enviarlo a una herramienta de este estilo.
    En mi caso uso Pocket, que además de servirme de archivo te envía un email diario con los post enviados a la herramienta no leídos (Pocket Rocket). Un servicio muy útil para obligarte a leer y a ser más selectivo a la hora de enviar post a la herramienta.Además te envía un email con contenido recomendado de entre los artículos que más interés han generado. Lo que te permite descubrir contenido interesante aunque no esté relacionado con tu interés principal.
    Por lo tanto es una herramienta muy completa que os recomiendo al 100% (tiene versión web y app).Otra herramienta uso para descubrir nuevos contenidos (aunque tiene otros usos como la creación de revistas, lectura de feeds, etc.) es Flipboard.
  • Lector de feeds (suscripciones a blogs): desde la desaparición de Google Reader, yo utilizo Feedly. Es sencillo de usar y tiene las funciones básicas necesarias.
  • Difusión de contenido: se que muchos community managers usan Hootsuite, pero yo soy fan de Buffer. La llevo utilizando desde 2011 y me funciona a la perfección. Por supuesto escribí un post sobre mi experiencia con Buffer.

3. Limitar el tiempo que dedicas a filtrar, leer y difundir

Y casi lo más importante,… limitar el tiempo que dedicamos a filtrar, leer y compartir contenido.

Ya veis que por mucho que nos esforcemos la cantidad de contenidos sigue siendo considerable.

Así que todo lo que exceda de ese tiempo o no lo leemos o en el caso de los lectores de RSS lo marcamos como leído. Si hemos hecho bien el trabajo anterior, no deberíamos estar ‘perdiendo’ demasiado contenido.

Como resumen (si os fijáis en el esquema de curación de contenidos) debemos:

  1. Ser muy restrictivos en la selección de fuentes de contenido.
  2. Usar herramientas que nos filtren el contenido, faciliten la lectura y su difusión.
  3. Limitar el tiempo que dedicamos a todo el proceso.
  4. ¡Disciplina y orden! Si nos empezamos a saltar estas ‘normas’ el caos volverá, así que ¡cuidado! :)

 

La imagen que acompaña al post (leer contenido) es de ShutterStock



from Blog de Marketing Online de Tristán Elósegui http://ift.tt/1NaIeWc
via IFTTT

No hay comentarios:

Publicar un comentario